Con 13 jonrones y 39 carreras impulsadas, líder en ambos departamentos tras los juegos de este martes, Yulieski Gourriel se robó el protagonismo de la temporada beisbolera cubana. Desde hace rato, todo el mundo habla del "gallo" espirituano, unos para bien y otros para mal, pero nadie permanece indiferente frente a él.
Incluso, los aficionados critican a la prensa por "subirle los humos" al muchacho, como si fuera un pecado hablar de sus números despampanantes. No recuerdo, en cambio, que nadie se quejara cuando ensalzábamos al gran Omar Linares, quien mereció titulares desde su debut en la pelota cubana.
En algún momento también se decía en las gradas que Linares no bateaba a la hora buena, pero después el mito se rompió por su propio peso. Fue imposible sostener aquel absurdo, con tanta evidencia en contra.
Recordemos rápidamente el jonrón de Omar contra Estados Unidos en Indianápolis 1987, su actuación frente a los Senadores de San Juan, aquellos tres bambinazos en la final olímpica de Atlanta 1996, el hit de oro en el primer juego con los Orioles de Baltimore, y el estacazo que hundió a Canadá en Winnipeg 1999, cuando nadie estaba bateando en el equipo Cuba.
Con Yulieski sucederá lo mismo y un día nadie hablará de cuando falló en Beijing 2008. Por cierto, confieso otra vez que yo también lo hubiera dejado batear en el momento cumbre frente a Corea del Sur. Se trata del pelotero más integral de Cuba y ese "detalle" no puede pasar por alto.
Calculemos la magnitud de un pelotero que necesite menos de 20 veces al bate para pegar un jonrón, menos de ocho oportunidades para conectar un extrabase, menos de cinco turnos para remolcar a un compañero, y menos de cuatro comparecencias para producir carreras (anotar o impulsar). Súmele a ello que se robe una base en más del 70 por ciento de las ocasiones y promedie más de .330 en toda su carrera.
Pues bien, solo dos peloteros reúnen esos parámetros en la historia del béisbol revolucionario: Linares y Yulieski. Un tercero, Alfredo Despaigne, los tiene todos menos el por ciento de robos.
En 20 series nacionales, Omar pegó 404 jonrones (14,76 como frecuencia), disparó 785 extrabases (7,59), impulsó 1221 carreras (4,88), produjo 2364 anotaciones (3,15), robó 246 bases en 341 intentos (72,14 por ciento) y terminó con average de 368.
Mientras, en nueve temporadas incluyendo la actual, Yulieski tiene hasta el día de hoy 171 jonrones (18,36), 416 extrabases (7,55), 668 impulsadas (4,70), 1162 producidas (3,12), 98 bases robadas en 128 intentos (76,56 por ciento), y 335 de average.
Sin dudas, los números no mienten. Este martes, además de Yulieski, Eriel Sánchez y Yenier Bello pegaron jonrones en la victoria espirituana sobre Las Tunas.
Otro que celebró en grande fue el santiaguero Alexei Bell, quien disparó su jonrón cien en series nacionales. Durante la presente temporada llegaron igualmente a esa cifra el avileño Isaac Martínez y el guantanamero Vismay Santos. En cualquier momento llegarán también el matancero Yoandy Garlobo (99) y el granmense Marcos Naranjo (97).
En total, 108 bateadores han concretado la hazaña. El primero de todos fue el capitalino Armando Capiró, el 16 de marzo de 1977, en el estadio avileño José Ramón Cerero. Era la tercera Serie Selectiva y el equipo Habana chocaba contra Camagüeyanos. Capiró terminó con 162 jonrones en 14 temporadas.
El tunero Joan Carlos Pedroso es el jugador activo con más jonrones (225). Entre 100 y 200 están el santiaguero Rolando Meriño (185), el pinareño Yosvani Peraza (182), el cienfueguero Osvaldo Arias (180) y los espirituanos Frederich Cepeda (176), Yulieski Gourriel (171) y Eriel Sánchez (161).
La lista sigue con el santiaguero Reutilio Hurtado (155), el villaclareño Eduardo Paret (139), el avileño Yoelvis Fiss (135), el capitalino Alexander Malleta (133), el tunero Danel Castro (130) y el granmense Yoenis Céspedes (125).
Luego aparecen el pinero Michel Enríquez (123), el villaclareño Ariel Pestano (123), el avileño Yorelvis Charles (117), el granmense Alfredo Despaigne (112) y otro villaclareño, Ariel Borrero (112).
El jonrón de Bell, en la parte baja de la décima entrada, dejó tendido en el campo este martes al equipo matancero. Otro juego definido en extrainnings fue el de Nueva Gerona, donde Granma superó a unos pineros que siguen amotinados.
Además, sobresalió el cerrado triunfo de Pinar sobre Villa Clara y el de Guantánamo ante Industriales en el único partido nocturno. Por cierto, el derecho capitalino Odrisamer Despaigne lleva tres derrotas consecutivas después de llegar a cinco victorias.
En los restantes duelos de la jornada, La Habana venció de un tajazo a Ciego de Ávila, Holguín batió a Metropolitanos y Cienfuegos le ganó cerradamente a Camagüey.
Yulieski Gourriel asumió el liderazgo de jonrones (13) e impulsadas (39). Foto: Roberto Ruiz