La sede de la Federación Democrática Internacional de Mujeres (FDIM), inaugurada en Sao Paulo, Brasil, fue denominada hoy Casa Vilma Espín, en homenaje a la dirigente femenina cubana, fallecida el 18 de junio de 2007.
Al estrenar el recinto, la presidenta de la FDIM, la brasileña Marcia Campos, apuntó que esta casa tiene que denominarse Vilma Espín, en recordación a la heroína y guerrillera cubana, vicepresidenta de la organización internacional, que la tiene como una de las dirigentes que supo aglutinar a miles y millones de mujeres del mundo entero en torno al ejercicio de la solidaridad.
La sede de la FDIM en América Latina no puede llevar otro nombre que no sea el de Vilma Espín, sostuvo Campos en honor a quien desde 1960 y hasta su fallecimiento ocupó la presidencia de la Federación de Mujeres Cubanas
(FMC).
Precisamente, en ocasión del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo de este año, la FDIM emitió un mensaje en el que reconoce en Vilma Espín a una mujer que siempre exhibió coraje, valor, solidaridad y consagración plena a América y al mundo.
En la historia de las luchas por el derecho de los pueblos, se destaca una mujer que llenó de gloria a Cuba en la defensa frente a tantas agresiones de quienes no comprenden que los países no se califican por su dimensión territorial, sino por su dignidad. Esa mujer tiene un nombre: Vilma Espín Guillois, exalta el documento.
"La historia, implacable ante el juicio crítico, dirá a las futuras generaciones, que VILMA nunca será olvidada, su nombre seguirá brillando junto a quienes supieron consagrar su vida por el derecho de los pueblos. Y nosotras desde la FDIM, repetimos: !Siempre Vilma!", apunta el mensaje de la FDIM.
La sede de la FDIM fue entregada a Campos por la ministra de la Secretaría Especial de Políticas para las Mujeres, Nilcea Freire, quien resaltó que con ese acto cumplía un compromiso del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, con la entidad internacional.
En la actividad estaban presentes representantes de 35 países de la FDIM, creada en 1945, fruto de la movilización de las mujeres para unirse bajo el programa de conquistar, practicar y defender sus derechos como madres, trabajadoras y ciudadanas.
También, la defensa de los derechos de los niños a la vida, al bienestar y a la educación; Conquistar y defender la Independencia Nacional y las Libertades Democráticas, por la abolición del Apartheid, la discriminación racial y el fascismo; y Por la paz y por el Desarme Universal.
En la ceremonia en Sao Paulo participaron en representación de Cuba, Ana Violeta Castañeda, coordinadora regional de la FDIM; Ana Milagros Martínez, funcionaria de Relaciones Internacionales de la FMC, y María Eugenia Guerrero, hermana de Antonio, uno de los cinco antiterroristas cubanos presos injustamente en Estados Unidos.
(Con información de Prensa Latina)