El cantautor franco-español Manu Chao afirmó aquí que siempre defenderá el proceso cubano: "No acepto, dijo, que países ricos y sin bloqueo económico se tomen el permiso de criticar a la isla".
Antes de opinar se debe limpiar su propia cocina y eso se le olvida a muchos políticos europeos, sostuvo el músico en una entrevista publicada hoy por el diario Trabajadores, en la que destacó los logros extraordinarios que ha conquistado Cuba y su experiencia política única en el mundo.
Chao se encuentra de visita en Cuba para participar en dos conciertos en homenaje al guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara, invitado por la Asociación cultural Hermanos Saíz.
El primero lo ofreció el viernes último ante más de 25 mil personas en la escalinata de la Universidad de La Habana, donde acompañó al cubano Kelvis Ochoa y a otros trovadores de patio.
Hoy actuará en el estadio Sandino, en la ciudad central de Santa Clara, donde reposan los restos del Che.
Al referirse a esa figura histórica, apuntó que su mítica traspasó cualquier barrera y llegó a los lugares más recónditos, algo que ni los medios de comunicación neoliberales han podido desvirtuar, a pesar de sus múltiples y conocidos esfuerzos.
Es increíble, agregó, que después de 40 años de su muerte, siga siendo un ícono revolucionario mundial.
A una pregunta sobre su manera de hacer música, respondió que siempre ha trabajado con sus propias reglas y si sus discos continúan vendiéndose pese a no contar con una campaña de publicidad que lo respalde, es porque tiene un público fiel.
Nacido en Francia y radicado en Barcelona José Manuel Thomas Arthur Chao, su verdadero nombre, está considerado por la crítica uno de los mejores exponentes de la música alternativa de los últimos tiempos de su país.