La Habana, 4 jun (AIN) El Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) reconoció hoy, en esta capital, al Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), por sus resultados a favor de la salud de los pueblos.
Durante la clausura del Congreso 70 Aniversario del IPK, José Miyar Barrueco, titular del CITMA, reiteró el papel del líder de la Revolución cubana Fidel Castro, como artífice del desarrollo de la ciencia en la Isla y entregó un reconocimiento a ese centro, de referencia internacional.
El doctor Gustavo Kourí, director del IPK, destacó que la institución ha cumplido con lo que expresara Fidel en 1993, cuando la inauguración oficial, en la cual auguró que no sería sólo para Cuba sino para la humanidad.
La doctora Concepción Campa, miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba y directora del Instituto Finlay , felicitó al colectivo, y encomió el rol que ha desempeñado durante varias décadas en la protección de la población cubana contra las enfermedades infecciosas.
Al recordar la frase martiana "la verdadera medicina no es la que cura sino la que precave ", Campa resaltó que los niños cubanos son inmunizados con 14 vacunas, de ellas 10 fabricadas en la nación, con buenas prácticas de producción y sometidas a inspecciones por organismos internacionales.
Luís Herrera, director del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, expuso acerca de la biotecnología y su aplicación a las enfermedades trasmisibles, y ejemplificó con la vacuna contra la hepatitis B que hace ocho años permitió no exista ningún caso reportado.
Entre otros reconocimientos otorgados al IPK en la jornada final del congreso, figuraron el de la Universidad de Harvard, Estados Unidos, por la contribución a la ciencia y a la medicina y haber beneficiado a muchos pueblos del mundo.
El doctor Manuel Santín, director nacional de epidemiología, significó que Cuba tiene larga tradición en el control de enfermedades trasmisibles y las llamadas tropicales que actualmente no constituyen un problema de salud.
Contrastó la realidad que viven hoy diversos pueblos del planeta, donde las enfermedades infecciosas representan el 45 por ciento de los fallecimientos en países pobres y el 63 por ciento en niños de cero a cuatro años en el planeta.