Varios estudios científicos han demostrado que los gatos están probablemente menos unidos a nosotros que nosotros a ellos. Por ejemplo, un gato que se separa brevemente de su dueño, al volver a reunirse con él no siente lo mismo que un perro.
Sin embargo, la mayoría de las personas que tienen a estos felinos por mascotas han revelado que han vivido experiencias que no cumplen esta norma. Desde despertarse por la mañana con su ronroneo mientras te frotan a tu espalda o incluso, horripilantes regalos de ratones y pájaros, son muestras del cariño de estos animales hacia las personas.
Mucha gente dice que los gatos no son tan cariñosos con sus dueños como los perros, pero estos gatos definitivamente parecen excepciones a esta regla. Estas imágenes son prueba de que los gatos también pueden mostrarnos el amor y el cariño a su manera.
(Tomado de Circoviral)