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Béisbol cubano: El ojo del tigre

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El nacimiento de las Series Nacionales abrió el movimiento más amplio de captación y desarrollo de talentos en esta disciplina dentro de Cuba.

Tiempo atrás, un entrenador cubano, ante la pregunta de qué le faltaba a un otrora campeón mundial para recuperar sus grandes resultados fue sintético y aleccionador: “el ojo del tigre”. Por estos días, nada parece más cercano para analizar, interpretar y opinar sobre nuestro béisbol que volver a esa sentencia, pues la mirada del felino encierra experiencia anterior, cálculo preciso, fuerza, valentía, creatividad, deseos, ganas, inteligencia, ambición y respeto.

Un torrente de ideas, criterios y hasta soluciones desembocan en aguas turbulentas y pocas veces coincidentes cuando se trata del pasatiempo nacional. Sin embargo, propongo volver a las expectantes pupilas del animal de rayas y garras furiosas para, lejos de cualquier verdad absoluta, penetrar en el mundo de las bolas y los strikes con autocríticas, insatisfacciones y una profunda preocupación no solo por los fracasos internacionales de los últimos años, sino también por cuánto debemos y podemos hacer hacia dentro de nuestra “selva beisbolera”.

Experiencia anterior, un necesario primer paso

El nacimiento de las Series Nacionales abrió el movimiento más amplio de captación y desarrollo de talentos en esta disciplina dentro de Cuba, mucho mayor incluso que en las ligas profesionales existentes antes del Triunfo de la Revolución. Y eso es lo primero que debemos preservar, no por capricho del concepto de territorialidad, sino por el impacto sociocultural en todo el país.

Con nombres actuales: Pinar del Río, Industriales, Sancti Spíritus, Villa Clara, Ciego de Ávila, Las Tunas, Holguín, Granma y Santiago de Cuba, o distintos como Ganaderos (Camagüey), Henequeneros (Matanzas) o la antigua provincia La Habana (Artemisa y Mayabeque)— todas las provincias del país han disfrutado al menos una corona en los certámenes nacionales, con la excepción de Guantánamo, Isla de la Juventud y Cienfuegos.

La pasión por batazos y lanzamientos llevó a la creación de campeonatos provinciales de primera categoría, lides hexagonales y todo un sistema piramidal (infantil y juvenil) en crisis hoy por la pobre cantidad de juegos, suspensión o desaparición en muchas provincias. Recuperar ese eslabón es imprescindible en el ojo del tigre.

Es cierto que las Selectivas subieron luego la calidad en una época dorada, pero la vida impuso su final por la poca atención material y política que recibían los conjuntos de parte de los gobiernos provinciales y demás entidades, ya que un híbrido de tres o cuatro provincias caía en territorio de todos y de nadie. Y al menos en Cuba ese apoyo es consustancial al espectáculo, en tanto la identificación de muchos aficionados seguía privilegiando al conjunto de su tierra natal y no un conjunto mixto de nombres.

Devolverle a la Serie Nacional (marzo - agosto) un calendario lo más cercano a los 90 juegos con un play off final —estructura evaluada por casi todos los peloteros y entrenadores como la mejor en 59 ediciones—; y la creación de una Liga Cubana de Béisbol (noviembre -enero) con las seis primeras selecciones de la temporada nacional e incluyendo los lógicos refuerzos para disputar no más de 45 partidos, son también coincidencias, casi unánimes, entre todos los actores.

Omar Linares ganó cinco coronas de bateo en series nacionales y una en la selectiva de 1992. Foto: IBAF

Cálculo preciso: dinero, recursos y transparencia

A diferencia de otras ligas beisboleras en el mundo, el concepto empresarial no se ha entronizado en la nuestra, aunque valdría la pena evaluar la introducción de algunas variables como patrocinio de empresas a los conjuntos y el de unidades presupuestas con tratamiento especial para los estadios, en los cuales se pueden arrendar más espacios a los trabajadores por cuenta propia o cooperativas en función de mejorar la gastronomía y tener mayor variedad de ofertas.

Es urgente igualmente resolver el pago diferenciado a quienes jueguen en la Serie Nacional y logren después llegar a la Liga Cubana de Béisbol, algo que no sucede en la actualidad con las dos etapas de la campaña y desmotiva a más de un jugador, pues los inactivos tras la primera fase ganan igual a quienes siguen en el terreno en la segunda.

Asimismo, es inconcebible que un director de equipo gane mucho menos que los peloteros a quienes dirige; o que exista demora de varios meses para pagarle el salario a los jugadores y mucho más en el caso de los conjuntos ocupantes de los tres primeros lugares y los ganadores de premios individuales.

Tampoco costaría pensar en un pago adicional para quienes participen por su rendimiento en los Juegos de Estrellas y ganen las pruebas de habilidades, incentivos inexistentes hasta hoy, pero estimulantes en un contexto donde cada edición recibe cada vez menos interés por parte de los peloteros, cuando debería ser todo lo contrario, incluso contar en su palmarés a la hora del retiro.

Por otra parte, duele ver también, a partir de los líquidos diarios que les corresponde en los hoteles, como la mayoría de los involucrados en la Serie Nacional vende los refrescos en función de aumentar sus economía individual, lo cual no puede resolverse ya con llamadas éticas ni quitándoselos, porque sería botar el sofá por la ventana.

Cálculos agradecidos serían también transparentar el dinero invertido por la Federación Cubana de Béisbol (FCB) a partir de lo recibido por las contrataciones de nuestros peloteros en ligas foráneas. ¿Acaso no pudiera disponerse de un 30 % de esos ingresos (en divisas directamente y a partir de un escala aprobada) para repartir en la Liga Cubana de Béisbol, lo cual elevaría la motivación y hasta disminuiría seguramente las gestiones personales de muchos peloteros para jugar en Colombia, Nicaragua y otras naciones?

Fuerza para crecer, valentía para cambiar

No hay secreto alguno sobre tres aspectos claves y objetivos que torpedean el béisbol cubano desde hace más de una década y han provocado su debilitamiento actual: la imposibilidad de lograr un acuerdo con la Major League Baseball (MLB) —el concretado en diciembre del 2018 duró apenas cuatro meses—; el éxodo de peloteros hacia el circuito profesional norteño y caribeño; y una fuerza técnica disminuida por la emigración, desde la base hasta los equipos nacionales.

Sobre ese trío de obstáculos reales se trabaja, pero los resultados son lentos y se necesita mucha fuerza para crecer en medio de este panorama, así como una extraordinaria valentía para cambiar cosas y no perder ese imán de cultura y pueblo que solo el béisbol puede provocar en Cuba.

El acuerdo reciente con la Confederación Mundial de Béisbol- Sóftbol dará apertura a todos los mercados de Asia, Europa y América, excepto MLB; en tanto es previsible aventurar que cada vez serán más los retornos de quienes probaron suerte, con éxito o no, en ligas profesionales y pedirán jugar y hasta retirarse delante de su gente. Bárbaro Arruebarruena, Pavel Quesada, Leslie Anderson y Carlos Juan Viera, por solo citar algunos, son ejemplos que se deben incrementar por años.

Por supuesto, donde más se pudiera avanzar, con acciones concretas y prácticas, es en el trabajo con los entrenadores de base, municipio y provincia. ¿Por qué no se estimula con un porciento que puede llegar hasta el 30% de su salario —o hasta divisas— a ese entrenador del Consejo Voluntario Deportivo o Academia local por cada pelotero que busque en los lugares más intricados, enseñe y promueva a equipos nacionales en cualquiera de las categorías?

Esa es la fuerza vital para crecer y mantener la vitalidad de este deporte. El otro acto de valentía sería convocar, con un carácter proactivo por parte de la FCB, a todos los peloteros con contratos personales en ligas profesionales, en función de que puedan integrar no solo selecciones nacionales, sino que vuelvan a sus equipos provinciales si así lo desean, acatando la disciplina y el reglamento de nuestros clásicos.

Es totalmente falso que después de tener dinero en abundancia no quieren vestirse con nuestros trajes, deslizarse en terrenos nada modélicos o ganar medallas en Clásicos Mundiales, Premier o Juegos múltiples.

Los riesgos de la contratación no van por ahí, pues República Dominicana, Puerto Rico, Venezuela y México, por poner cuatro ejemplos, cuentan con jugadores tan o más millonarios que nuestros Despaigne, Gracial y Moinelo, y dejan alma, corazón y vida con sus uniformes nacionales.

La moraleja entonces es que hay que aprender a dirigir ahora un equipo de jugadores profesionales con mucho dinero —algo que no hicieron nunca Jorge Fuentes, Pedro Chávez, Pineda, Higinio u otros—, con fatiga extrema en algunos momentos del año y con comportamientos adquiridos en ligas profesionales no vistos antes en nuestras Series Nacionales.

Y claro que le puede fallar la bomba a más de uno en momentos tensos, pero su calidad nadie puede desaprobarla y hay pruebas de eso con lideratos de jonrones, premios de jugador más valioso, entre otros lauros.

Creatividad permanente, deseos y ganas de la mano

Un concepto básico si queremos pensar el béisbol como país es desterrar de una vez y por todas que la única responsabilidad sobre los desastres de esta disciplina la tiene un hombre (Higinio Vélez, titular de la FCB), una Comisión Nacional o en el mejor de los casos, el INDER. No obstante, cambios en la presidencia de la FCB y en otros cargos deben sucederse ya por lógica renovación y gestiones no del todo efectivas a la luz pública.

El béisbol para dar un salto como el que esperamos debe lograr la alianza más grande y eterna de este país. Tiene que interesarle y aportar ideas el Ministerio de Cultura (para elevar el nivel artístico entre inning y ayudar al espectáculo), Transporte (para que los árbitros no se trasladen sin un vehículo permanente), Turismo (porque en sus hoteles siempre se puede mejorar más), Energía y Minas (para lograr encender las luces cuando lo permita la situación de combustible y la arcilla de los terrenos), Agricultura (mejorar el césped de los terrenos), Comercio Interior, Salud Pública, Industria Alimentaria, Relaciones Exteriores, Ciencia y Tecnología, Industria, Inversión Extranjera y así hasta llegar al último organismo o instancia. Solo así podremos ver algunos frutos a corto y mediano plazo.

La creatividad encuentra también su más alto reto en la motivación a los niños desde los 6-7 años en campos y ciudades (ahora que la tecnología quiere robarse la diversión sana y el ejercicio físico); en olvidar que el padre de mayor poder adquisitivo no tiene que ser el padre del gran pelotero, pues los talentos naturales existen y son mejores que los impuestos por el maldito dinero; en lograr más pelotas, bates, guantes y demás implementos desde la producción local que crece en el país y no siempre es divulgada ni se aprovecha como merece por trámites burocráticos.

Pero también hay que crear estímulos morales y nada mejor que acabar de darle vida al socorrido, necesario y reclamado Salón de la Fama del Béisbol Cubano, bombardeado sin sentido por las propias autoridades deportivas cuando estuvo a punto de echar a andar nuevamente en el 2018.

Hay que acabar con quienes siguen viviendo del béisbol y no para el béisbol, en todos los niveles. Son caras de las derrotas que no se ven, pero están y hacen tanto daño como los ponches que nos propinan y las derrotas que crecen en la arena internacional.

Es tiempo de deseos y ganas, que significan darles reconocimientos a hombres tan anónimos y sencillos como Nicolás, el Dios de todos los sueños infantiles de béisbol en el Pontón, del municipio Centro Habana; y a otros tan grandes e imprescindibles como el pinareño José Manuel Cortina, quizás el entrenador de pitcheo que más brazos ha hecho y salvado en la historia de nuestra pelota.

No olvido los deseos y ánimos de hablar más sobre nuestros árbitros, merecedores de una mejor remuneración a la hora de salir a impartir justicia, pues es casi ridículo lo que se le paga por las tensiones a que están expuestos. De paso, habrá que exigirles superaciones constantes, ubicaciones certeras para decidir jugadas y carácter más recio para hacer valer el orden sin necesidad de botar peloteros y mánagers ante la más mínima protesta.

Inteligencia y ambición: binomio ganador

La mirada del tigre cuenta con la inteligencia y la ambición como cartas de presentación inconfundibles. Sobre las dos líneas de un campo verde todo se define entre una correcta estrategia y ese poderoso bastión psicológico que hace entrar a cada pelotero en la caja de bateo pensando siempre en darle una conexión efectiva, inolvidable o definitoria al lanzador que tiene a 60 pies y seis pulgadas.

Los últimos triunfos medianamente importantes para nuestra selección nacional se remontan ya a los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014 y la Serie del Caribe en San Juan, 2015, donde regresamos monarcas. Desde entonces, fracaso tras fracaso, presión y desespero, orfandad de podios cimeros y una profunda preocupación por la casi siempre anémica ofensiva han dejado ver fallas visibles y otras que solo a partir de tendencias modernas del béisbol pueden ser leídas o explicables.

Impaciencia en el home, poca producción de carreras, swing de fuerza en lugar de swing de contacto, mal corrido de las bases, falta de liderazgos ofensivos y en el staff de pitcheo, demasiado conservadurismo a la hora de dirigir, muchos cambios de mentores en poco tiempo y una generación que se ha envejecido sin la debida renovación de éxitos colman las causas de nuestros reveses, aunque no son las únicas.

Pero para corregir eso debemos comprar máquinas de bateo que no tenemos y en el mercado internacional pueden costar unos 11 mil dólares. Es imperioso un conocimiento mayor de la sabermetría desde la Serie Nacional, para aplicarla luego internacionalmente no como moda, sino de herramienta necesaria y vital para ganar partidos.

Finalmente, un director que no esté involucrado en la temporada regular y se haga cargo por un ciclo competitivo del equipo Cuba parece la fórmula ideal para ese cargo, mientras el mentor ganador en la Serie Nacional sería el encargado de conducir los destinos de sus muchachos en la Serie del Caribe.

Hoy la ciencia puede ganar un juego, darle la bienvenida a un campeonato y regalar muchos triunfos si se aplica con serenidad, sin maratones o por la fuerza. Estadísticas que antes nadie miraba pueden decidir turnos en una alineación, en la cual, por ejemplo, ya está demostrado que el mejor hombre no es el tercero, sino el segundo.

Entrenar jugando, en lugar de preparaciones largas marca el ritmo en el planeta béisbol y nosotros seguimos aferrados muchas veces a un pasado glorioso, pero sin vigencia para recuperar lo perdido.

Impulsar carreras, dar jonrones, mejorar el control, entrenar mucho la defensa de campo, saber realizar ajustes en cada turno al bate y hasta en cada lanzamiento persisten como espadas afiladas y garantía de triunfos.

La realidad es que todo eso y más lo hemos perdido en las selecciones nacionales, no lo aplicamos en la justa doméstica y menos en categorías juveniles. Y nuestros rivales crecen y ya no son solo Estados Unidos o Japón los verdugos más fuertes, se han sumado Canadá, Holanda, Puerto Rico, Venezuela y hasta Colombia.

El respeto por nuestros paradigmas, por Cuba

Desde el 25 de noviembre, toda Cuba tendrá la posibilidad de aportar más ideas para el renacer de nuestro béisbol. Con seguridad se escuchará hablar de terrenos exigiendo manos y voluntades para sus rescates, de una demanda insaciable de implementos (específicamente pelotas y guantes), y de estudios relacionados con el béisbol engavetados en las Facultades de Cultura Física.

Tampoco faltarán voces que se quejen sobre la poca fuerza técnica en poblados y municipios como si instrumentar cursos emergentes con peloteros retirados costara una barbaridad al sistema del Inder. Se comprobará también, por disgustos o maltratos, la lejanía o distanciamiento de no pocas glorias deportivas.

Y por supuesto varios abogados defenderán la asesoría foránea a nuestra pelota, cual invasión de amnesia total, pues Cuba es la de mayor número de entrenadores esparcidos por el mundo enseñando béisbol, y más recientemente hasta Béisbol Five.

Por desgracia, hoy el paradigma de llevar las cuatro letras en el pecho cede ante el efecto monetario en muchas familias y tener un hijo, hermano, primo o nieto bateando o lanzando se convierte, en muchos casos, en una apuesta presumible a salir del país hacia cualquier liga extranjera cuando ya tengas las herramientas aprendidas.

El compromiso con quien lo descubrió y su sociedad se diluye entre carencias reales y la famosa idea de querer probarse en el mejor béisbol del mundo, aunque ya sabemos que solo un 10 % de los peloteros cubanos que han decidido ese camino acaban jugando en la MLB. La mayoría termina en ligas de menores (AA y AAA), academias dominicanas y con un gorrión tremendo. Solo que de esto último apenas se habla.

El respeto a una potencia beisbolera en América y el mundo, con 25 coronas mundiales y tres olímpicas, pasará siempre por nuestro pasado glorioso y teorías futuristas acerca de cómo levantarnos de este pésimo momento, en el cual prevalece intacta, eso sí, la pasión más encendida por ver ganar a su equipo favorito, aunque parodiando a aquel entrenador, hoy nos sigue faltando en el béisbol cubano “el ojo del tigre”.

Cubadebate le invita a sumar sus opiniones a este gran debate, entre todos podemos aportar más ideas para el renacer de nuestro béisbol. 

Estados de opinión sobre el béisbol y la SNB presentados en la Asamblea Nacional

Fragmentos de los estados de opinión sobre el béisbol y la Serie Nacional presentados en la Comisión de Salud y Deportes de la Asamblea Nacional (2018)

Sobre la Serie Nacional

  • La Serie Nacional sigue siendo el principal espectáculo sociocultural y deportivo del país, a pesar de algunos problemas de calidad y de la baja asistencia a los estadios, comparados con etapas anteriores.
  • A pesar de que algunos han insistido en disminuir equipos, la mayoría de los peloteros, entrenadores y aficionados apoyan los 16 conjuntos, al menos en una primera fase, pues es la garantía de continuidad del trabajo, al tiempo que permite que cada provincia disfrute del principal pasatiempo nacional con una representación local, con total sentido de identidad.
  • La calidad de los terrenos no es igual en todo el país, lo que motiva en ocasiones errores, o que los peloteros no hagan determinadas jugadas por miedo a lesionarse.
  • Los esfuerzos para la iluminación en los estadios son notables, pero todavía hay algunos con grandes problemas que no permiten los juegos nocturnos, mucho más factibles para el público y que permitiría a los equipos poder entrenar en jornadas vespertinas para luego jugar en horario de noche.
  • El arbitraje mejora en comparación a las últimas temporadas, pero todavía se aprecian malas ubicaciones de los árbitros en las bases, lo cual se traduce en decisiones erradas. Asimismo, es demasiado amplia la zona de strike en comparación a lo que se ve internacionalmente y se sigue cantando más la horizontal que la vertical, lo que luego perjudica en las competencias internacionales.
  • No en todas los dogouts es posible contar con frutas para los equipos visitantes y home club, un alimento necesario para el pelotero que juega como promedio más de tres horas, la mayoría de las veces al sol intenso.
  • Es positiva la incorporación de figuras emblemáticas y populares a la dirección de los conjuntos, aunque sigue siendo una preocupación que no haya una escuela para formar mánagers o directores, pues no siempre ser buen pelotero es sinónimo de ser buen director.
  • Los promedios de bateo (individual y colectivo) son demasiado altos en comparación a lo que sucede en la media de los torneos internacionales, y a nuestra propia historia, lo que podría ser debido a un pitcheo muy débil en la mayoría de los equipos.
  • El pitcheo tiene entre sus males mayores el descontrol (demasiados boletos), a lo que se suma un pobre pensamiento técnico-táctico de los lanzadores, pocos lanzan por encima de las 90 millas y un solo poseer un staff de abridores con calidad que no sobrepasan de tres por cada conjunto. El espectáculo es uno mientras está el abridor y es otro cuando entran los relevistas, los que a veces desfilan de forma interminable.
  • La defensa ha mejorado, pero a las malas condiciones de los terrenos se suma que es lo que menos tiempo se dedica en las prácticas de cada conjunto, lo que repercute a la larga en la calidad del espectáculo.
  • Los índices de robos de base han disminuido notablemente año tras año, con raras excepciones; en tanto aumentan los toques de bola, contrario a lo que sucede en otras ligas del mundo y en la estrategia moderna del béisbol.

Sobre el sistema de béisbol en todo el país

  • Algunos consideran que hay carencias técnicas y tácticas, y desconocimiento de elementales fundamentos del juego de béisbol en los muchachos que llegan a las categorías juveniles, incluso entre quienes están hoy en la Serie Nacional. Por ejemplo, no saben adónde tirar en caso de un batazo a los jardines, no dominan las conexiones por detrás del corredor, no saben anticiparse a un batazo o jugada del contrario, entre otras.
  • Muchos consideran que es imprescindible elevar la preparación científica de entrenadores, desde la base hasta la Serie Nacional, no sólo con nuestros mejores profesores internos, sino también con cursos y postgrados con invitados extranjeros a partir de las tendencias internacionales.
  • Algunos proponen rescatar áreas emblemáticas en cada provincia, donde se organicen copas, certámenes locales, de 15 a 20 juegos, que permitan mantener a los futuros peloteros jugando una importante parte del año. Eso se hizo en un momento, pero hoy es casi nulo.
  • Es positiva la celebración de los campeonatos de béisbol sub 23, aunque se puede perfeccionar el sistema de competencia, pues se hace por grupos hoy, en función de que los jugadores al terminar tengan más partidos celebrados. La calidad y el horario todavía no son los óptimos, pero es imprescindible mantenerlos y ponerle más ciencia, y en la medida de las posibilidades más recursos, como escalón imprescindible para la Serie Nacional.
  • Existe el comentario de que el éxodo de peloteros ha comenzado a crecer en edades tempranas, es decir, se van los prospectos que luego afecta el ciclo de la Serie Nacional.
  • Valorar experiencia de algunos territorios que deben ser generalizadas, como la escuela de pitcheo de Camagüey.

Del espectáculo en general

  • No todos los territorios ven a los Estadios como el lugar que necesita prioridad en cuanto a la gastronomía y los mantenimientos constructivos puntuales para cada Serie antes que comience.
  • La transmisión televisiva no siempre coincide con la mejor subserie de la semana, a veces por el tema de transportación y disponibilidad de remotos, pero otras por falta de coordinación ICRT-Federación Cubana de Béisbol.
  • Sigue siendo escasa y a veces nula todo lo concerniente a la divulgación de las hazañas de los peloteros y la comercialización de souvenir, camisetas, gorras, pelotas, postales, fotos, afiches, entre otras cosas, como parte del espectáculo, lo cual afianzaría los vínculos entre protagonistas y aficionados.
  • Las conferencias de prensa en los play off han mejorado, pero todavía hay resistencia de mentores para asistir, lo cual debe estar reglamentado, gane o pierda, tal y como es la práctica internacional y desea nuestro pueblo.

Sobre los resultados internacionales

  • Algunos creen que ya Cuba no ganará más ningún torneo internacional si no se convocan a los peloteros cubanos de otras Ligas que no residen en Cuba, pero que tampoco han sido desertores.
  • La confección de los equipos Cuba con los mejores jugadores, incluso los contratados por nuestra Federación en otros países, no es directamente proporcional a los resultados, pues hay menos producción de carreras en los torneos y tenemos un pitcheo inferior a la media de los torneos.
  • Otros creen que la dirección de los conjuntos han cometido errores tácticos en la toma de decisiones, algunos de los cuales han costado victorias, aunque se sabe que hay más variables que inciden, pero estas son las más ilustrativas.
  • Se reconoce que enfrentamos ya a jugadores profesionales en casi todos los eventos, pero la calidad histórica de los peloteros cubanos que integraron esas selecciones, la inteligencia de nuestros entrenadores y la tradición beisbolera nuestra, son la base que siempre hemos contado para levantar títulos y coronas, a pesar de todas las dificultades.

Se han publicado 477 comentarios



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  • Gabriela lopez dijo:

    Todavia ven pelota los cubanos??? El futbol es el deporte nacional de facto

  • Miracle dijo:

    El beisbol no es ajeno a lo que pasa en la sociedad, es más es un reflejo de esta, mientras lo que rodee al deportista se vea empañado por la funcionalidad del país seguiremos con los problemas. Se miente ante la visita de dirigentes, para después volver a la triste realidad del maltrato y la ineficiencia, porque va a ser diferente la pelota, desde los inamovibles hasta los que manipulan el tema del Real bloqueo para su conveniencia y no cambian la forma de pensar para su beneficio propio. Ahí están lo que asumen quitarle el derecho de ciudadanía a cualquier cubano que salga del país en la forma establecida por los decisores. Cambiemos la forma deE pensar y de ver el mundo y cambiará la sociedad y con ello nuestra pasion, quees el baseball , de lo contrario seguiremos oyendo los cuentos de los que fueron a las Olimpiadas, no nosotros, y repitiendo documentales de lo que alguna vez fuimos

  • radames dijo:

    La doble sesión es una idea que ayuda a que nuestros niños y adolescentes estén en las escuelas y no en lugares inadecuados, pero también frena el desarrollo del deporte en general no solo del béisbol, es casi imposible después de las 4 de la tarde enseñarle a nuestros niños los rudimentos de cualquier deporte, creo que esta una de las razones fundamentales de los resultados actuales de nuestro deporte en general y no solamente el éxodo de atletas, por eso llegan con muchas deficiencias a nuestros equipos nacionales.

  • Lad dijo:

    Ya llevamos años hablando de que vamos a hacer y seguimos esperando que la respuesta caiga del cielo, lo mejor adaptarnos a las circunstancias. Mientras más rápidos aceptemos las cosas, más rápidos podremos volver a la élite.
    1. Olvidar y pasar página tenemos que incluir a los peloteros que están fuera del país en la conformación del equipo Cuba. Todos son cubanos y nacieron en Cuba. Debemos unirnos y multiplicarnos y no dividir que nunca trae nada bueno.
    2. Dejar la liga de 16 equipos que siga jugando por el día como una liga de AAA o de desarrollo no importa el nombre. Porque su calidad no es buena.
    3. Crear una liga superior o profesional que la palabra correcta pq nuestro peloteros cobran por jugar por lo que son profesionales. Dónde haya 4 o 6 equipos, pero con peloteros que ganen mucho mas, que puedan venir a jugar los que están afuera y hasta extranjeros aunque se ponga límite en esto último.
    4. Permitir la inversión de empresas o patrocinadores para estos equipos profesionales para mejorar los estadios, uniformes, tecnología etc.
    5. Permitir los cuentapropista o cooperativas o empresas como cimex, palmarés, etc para los servicios gastronómicos mejores pq demostrado gastronomía no puede con los estadios, lo que han echo es echarlo a perder.
    Aceptar los patrocinios o la inversión extranjera o de empresas mixtas no significa abandonar los principios del deporte revolucionario, sino simplemente adaptarnos a las condiciones actuales. No hay que vender los estadios ni los equipos, pero si subir los precios de entrada y darle más importancia a la venta de productos y souvenirs. Es convertir el estadio un lugar de placer y disfrute de la familia cubana. Si se puede lleva engranar muchas cosas, pero se puede.

  • KAKA50 dijo:

    Estoy de acuerdo con hacer algo para salvar la pelota, pero cuando algien de los que tienen la responsabilidad haran algo por nuestro futbol y lo sacaran del ostracismo, no tenemos terrenos decente y tenemos que jugar en otros paises que nos prestan su terreno habiendo la FIFA ayudado tanto a CUBA, creo que es hora que la prensa la Tv y todos nos pronunciemos para sacar adelante nuestro futbol

  • Lázaro Jesús Nieves Martínez dijo:

    Los problemas de beisbol en Cuba no está ligada a la falta de talentos porque eso sobra en este pais, el asunto está en la disciplina administrativa,tecnica, deportiva y de equipo que presenta nuestra pelota, y está demostrada tanto en la serie sub-23, nacional como en eventos internacionales donde no se acaba de entender que el beisbol ha evoluonado en todos ordenes del juego y se aplican las más modernas avance del conocimiento tecnico y se aplica el escauteo del contrario, y se juegan muchos partidos que es donde se hacen peloteros. Muchos dicen que en Cuba no hay entrenadores, eso es falso porque lo tenemos y de muy alto nivel, lo que hay es que observar disciplina y ser riguroso y respetuoso de los entrenamientos.

  • USC dijo:

    En nuestro país hay muy buenos técnicos, comentaristas deportivos, buenos peloteros retirados, por haber hay una falcultad universitaria del deporte y no se cuantos técnicos de base y todos saben más que todos nosotros de béisbol porque su trabajo es ese. Por tanto son los que deben reunirse y hacer una propuesta bien pensada y bien abarcadora y esa propuesta es la que debiera circularse para que se enriquezca. Todavía no ha sonado el gong y vean la cantidad de cosas desatinadas que se hablan. Por favor hagamos las cosas bien hecha porque sin empezar ya estamos mal,
    no quiero ver el final. Primero se elabora un proyecto de documento que se enriquece con la participación de los que saben. A nadie se le ocurre en Cuba ponerse a
    discutir como debe funcionar el ballet
    nacional o la música, etcétera. Eso lo hace expertos, conocedores porque incluso esa propuesta pasa por normas jurídicas que deberán elaborarse a partir de las decisiones que se tomen. Me viene a la mente al eslabón más bajó de esta cadena, el preparador de la base que descubre y prepara un talento y luego nadie, pero nadie se acuerda de ese humilde instructor para nada ni para un modesto estímulo. Por eso
    digo que eso es algo muy serio y abarcador. Las cosas se hacen bien o no se hacen. Dejemos las pasiones a un lado y hablemos seriamente. No son momentos de emociones, sino de razones.
    Muchas gracias

  • Evelio Barros dijo:

    Sencillamente dejar que los cubanos que juegan en la MLB y en otras ligas profesionales puedan jugar en Cuba sin necesidad de que tengan que hacer pronunciamientos politicos seria un equipo Cuba inbatible. Entonces empezaremos a ganar.

  • Relys dijo:

    Excelente y amplio su análisis Joel, solo hace falta que los que deciden lo tengan en cuenta y lleven a la práctica lo que se pueda. Cuando leo y oigo tantas opiniones populares o especializadas como la suya o como la de Frangel Reynaldo, no me explico como no se les hace caso o como éste último no tenga un cargo dentro del beisbol cubano donde promueva y aplique nuevas concepciones que contribuyan a mejorar nuestra pelota y digo mejorar pues como veo las cosas creo que vamos rumbo a tocar fondo, lo que significa que no estaremos dentro de poco ni en la Olimpiada ni entre los 10 primeros lugares a nivel mundial, algo más lento pero igual a como le ha sucedido a todos los deportes colectivos cubanos en los último tiempos. Gracias

  • Pereyra dijo:

    El terreno que hemos perdido en el beisbol no se recupera en dos días, por lo que considero que aunque nos duela, deberiamos dejar de intentar ser resultadistas y trabajar para el mediano y largo plazo. Eso no quita que hagamos lo mejor posible por clasificar a los próimos juegos olímpicos.
    La otra realidad es que el deporte de hoy necesita de la ciencia, necesita de los mejores implementos, necesita de torneos de preparación, quiere decir que necesita de dinero bien utilizado y la situación nuestra es complicada. Pero que si podemos hacer? Pues retomar las mejores prácticas que nos llevaron a planos estelares, sin querer comparar las épocas. Debemos retomar la masividad y la búsqueda de talentos en todos los rincones del país, que no solo haga equipo el hijo del padre que puede comprarle los implementos y que desde las categorias inferiores se juegue mucho, mucho, mucho, beisbol. En el juego diario está el desarrollo, jugando 20 ó 40 partidos al año no hay desarrollo y que se busquen mecanismos para desarrollar para desarrollar las categorías inferiores, que aprendan a fildear correctamente, a tocar la bola, disciplina tactica en el cajón de bateo, a estar concentrado en el juego para evitar errores mentales, a batear por detrás de los corredores, etc, etc, etc. El beisbol es super rico y por último, el tratamiento, atención y oído atento a las glorias deportivas. Tenemos tanto talento marginado, tantas posibilidades de buenos entrenadores de bateo, de fildeo, de picheo, que no tenemos que improvisar. Pero a los directores de equipo y a los arbitros tenemos que prepararlos, tienen que estudiar y superarse. Todo no se puede dejar al talento o la improvisación.
    Los tiempos cambiaron y nosotros nos quedamos estancados en el tiempo. Si tenemos exodo de talentos y poco dinero, aunque mantengamos la serie nacional, debemos diseñar una competencia, en las fechas idóneas donde se concentre la calidad. El mejor picheo, el mejor bateo y que jueguen. Que nadie tenga seguro estar en el equipo Cuba y que se premie el resultado, que haga el equipo el que lo merezca y que se premien tambien los resultados individuales. Al jonronero, al lider en impulsadas, etc.
    No es sencillo, tenemos bastante por hacer, pero se puede. Es mi criterio

  • Blas Hernández Hernández dijo:

    1- Sigan poniendo ....futbol, .....futbol, .....futbol y más futbol de cuanta liga hay en este mundo y no pongan pelota de la mejor del mundo para que todo el mundo aprenda. No transmitieron ni un juego de la final de la MLB.
    2- Hay que hacer dos ligas una grande y otra doble A como lo hacen en gramndes ligas para el que está arriba siempre trate de estar bien y en cuanto patine baje a doble A y los de la doble A estén siempre en forma tratando de subir a la grande. Claro remuneraciones diferentes.
    Espero que tantas opiniones sean tomadas en cuenta y no se queden aquí en cubadebate, si no no sirve de nada escribir

  • Josielvis Martín gracía dijo:

    Hasta que cuba no permita q los jugadores de la Major League MLB jueguen con el equipo, seguirán los fracasos del béisbol nacional... Al final, todos ellos Son Cubanos!! Y si los invitan a jugar con cuba, la mayoría va a jugar!! Y cuba va a ganar!! Eso si es seguro, esa es la única forma!!

  • Kiko dijo:

    saludos creo que para retomar el lugar que nos corresponde en el mundo del béisbol debemos regresar a la masividad de antaño cuando se buscaba el talento desde las categorías inferiores y se buscaba a los peloteros en donde estuvieran en las lomas los campos en cualquier barrió no como ahora yo muchas veces escuchó cuando un pelotero emigra a otras ligas que el inder se acredita la formación de este deportista y ya eso me suena falso porque veo y e conversado con padres que sus hijos entrenan béisbol y la verdad la cantidad de dinero que un padre debe invertir en sus hijos es una suma de importancia realmente el inder no aporta prácticamente nada entonces niños muchachos con talento no pueden ni soñar con practicar béisbol porque sus padres no pueden costear sus 3ntrenamientos ni comprar los aditamentos necesarios entonces ya desde ese instante empezamos a perder el juego sin contar la poca profesionalidad de los entrenadores que lo que hacen lo hacen con amor más que con preparación y lo otro es la poca remuneración muchos emigran otros dejan de practicar y pasan a otras actividades para poder satisfacer sus necesidades y las de su familia creó realmente que para que el béisbol cubano se salvé hay que trabajar duro desde la base y hay que estar dispuesto a cambiar muchas cosas

    • Mauricio Alberto Pérez Trujillo dijo:

      Hay que trbajar duro con el arbitraje

  • Leoncio Aragon dijo:

    Cuando existia una selectiva de 6 equipos era mas fuerte , iban los mejores y se sabia quien era realmente el bueno

  • Walk dijo:

    En mi opinion mientras la base sea unicamente las escuelas de alto redimiento y no se juegue pelota wn.los barrios y en.los estadios municipales las edades mas tempranas solo entrenen un.mes o dos antes de.los torneos y no practique todos los dias y jueguen entre ellos como se hacia antes no lleguaremos a tener la cantidad de.talentos o un nivel de mas cantidad de peloteros de una calidad superior como la tuvimos antes los tornes intermunicipales y provinciales sean de mas calidad le voy a poner un ejemplo k vi estas vacaciones en el estadio de bejucal se hizo un interbarrios de softbol en el horario nocturno lanprecencia denpublico fue mayor por gran margen en cada encuentro a las la serie de beisbol provincial el exodo de los talentos influye pero si a estos no se les trata con un nivel de antencion en todos los ambitos superior k al resto no los lograremos retener y debemos pensar k lo k se gaste se recuperara cuando alguno de estos tenga un contrato en una liga foranea y en la calidad de los juegos denla serie nacional

  • Jorge L Gomez M dijo:

    Amo al Beisbol,,Cubano,y el todo el mundo,,pero veo con tristezas,,q el de Cuba,,esta ciendo afectado,,por su enemigo deportivo,,""""El Futbol"""una gran mayoria de jobenes ,,se inclinan por el futbol..tambien la desmedida,,suma de $$$$,,q,las grandes ligas en Estados Unidos,,les pagan a los destacados peloteros, Cubanos,,q juegan aca,por temporadas de tres o cinco anos,.

  • Jose Pozo dijo:

    Considero que el problema no es gastar tiempo en comentarios que nada aportan sobre algun equipo en particular, ni de si antes era de otra manera creo debemos centrarnos en lo que se nos convoca y es tratar de mejorar nuestro beisboll.
    Yo voy a dar mis ideas y aclaro no soy ni me creo experto.
    1.El nivel cultural de nuestros peloteros de elite debe mejorar, en las academias de otros países dedican tiempo a,Edo y hasta aprender idiomas, se sabe que un mejor nivel intelectual ayuda a modificar muchas cosas y a manejar mejor los estados de ánimo.
    2.Considero que tomando en consideración el poco tiempo hasta marzo y por la importancia de ese evento clasificatorio ya debía designarse con tiempo el manager y hasta la preseleccion para que fueran funcionando como un equipo y no como la suma de figuras individuales y con ellos ir trabajando desde ya en los problemas táctico técnicos, zona de strike, jugadas combinadas.
    3 Que desde ya el que fuese designado director tuviera un asesoramiento sabermetrico y del scauteo de los equipos rivales.
    4. Elevar la autoestima del pelotero, no es solo un acto de abanderamiento un par de días antes de salir es desde ya todo un proceso de reconocimiento público y que sus fotos e historial salgan en los medios igual que se ha hecho con compañeros en los procesos eleccionarios.
    5 Mejorar el trabajo psicológico

  • leo dijo:

    En mi opinión para la postemporada deben clasificar 8 equipos como era antes y no 6 como es ahora y esto da la posibilidad a más provincias y también a más Play Pdf que es la gran fiesta de La pelota en Cuba. Saludos

  • leo dijo:

    Quise decir más Play Off

  • Rey dijo:

    Muy buen artículo Joel, creo que nuestro béisbol necesita una revolución desde la base, Entrenadores he implementos deportivos en todas las categorías, un serio problema hoy sobre todo en los municipios del interior del país, donde una competencia puede durar para un equipo solamente tres juegos y se halla entrenado todo un año o una semana solamente.
    La serie provincial se juega solamente dos días a la semana jugando doble encuentro, esto atenta contra la preparación física de los atletas a demás de que se juega muy poco
    El horario de los juegos es incorrecto pues es horario laboral y de clases en todo el país y el público no puede asistir y esa es la razón de ser del deporte, el pueblo.
    Los narradores provinciales ya no viajan a las provincias con los equipos y se encadenan a dónde se viaja, por lo tanto te encuentras con q los narradores no dominan los rostros los números los lesionados.
    Las transmisiones televisivas nunca están en las mejores subseries, este año por ejemplo hasta se retransmitieron subseries porque no podían transmitir en vivo. Generalmente los narradores tampoco viajan y lo hacen desde un monitor.
    Son solo algunos detalles que han venido manchando ese gran espectáculo que es el béisbol en nuestro país.

  • Arquímedes dijo:

    Hace unos pocos años atrás, Japón, padre del Judo, perdió su hegemonía mundial. AUTOMÁTICAMENTE se pusieron a buscar las causas (sin medias tintas) y, desde las escuelas (donde se enseña como parte de la educación física) reestructuraron la manera de hacer las cosas, y mírenlos ahora.............en cada podio mundial u olímpico hay al menos un (a) Japonés o Japonesa, si hablamos de Gran Prix y similares por lo menos dos.
    "A veces el leñador debe hacer un alto para amolar el hacha", y nosotros hace rato debíamos haberlo hecho.

  • Eren dijo:

    He analizado con detenimiento todos los comentarios expuestos aquí en esta sección que realmente ha causado gran expectación a raíz de lo publicado. Y sin dilatar mucho tocando temas tan sensibles a nuestra economía me he enfocado en plantear la siguiente propuesta ( perfecta o no para mí es la más convincente para fijar una estructura definitiva a nuestra liga). Primero que nada debemos mantener las Series Nacionales como movimiento de localización y desarrollo de los prospectos en cada rincón escondido de nuestro archipielago. Además que permite masificar nuestro pasatiempo tambien conserva nuestra indiosincracia cultural que identifica cada región y por supuesto se consigue el apoyo necesario que cada provincia necesita de sus aficionados para batallar en cada presentación. Muchos opinan que debiera haber dos campeonatos por separado con un campeón en cada una pero desde mi punto de vista eso traería muchas confinfuciones a la hora de premiar que director merece ir a la Serie del Caribe pues uno triunfaría en una temporada larga de 90 juegos sin refuerzos y el otro en una corta de 45 juegos donde la suerte y los refuerzos opacan su verdadera dirección. Ahora bien no es necesario dividir nuestra liga cubana en una Serie Nacional y la otra en una selectiva. Mi sugerencia es justa, económica y más competitiva sin violar dos aristas fundamentales que son, primero mantener en activo y jugar mucho para desarrollar los jóvenes talentos y segundo lograr que los equipos no pierdan la combatividad y sigan luchando porque todos tendrán una meta a vencer. La creación de nuestra definitiva liga cubana de beisbol debe unir lo mejor de cada experiencia acumulada en las exitosas series nacionales donde se jugaban 90 juegos y unirla con lo mejor de la actual que para nadie es un secreto ha garantizado el espectáculo que el pueblo reclama.
    En cuanto a la estructura de esta liga o Serie Nacional (como le quieran llamar) estará dividida en tres etapas que comprende desde finales de Marzo hasta comienzo de Enero.
    La primera etapa del campeonato llamemosla "la pre-temporada" en la cual estarán los 16 equipos representantes de las actuales provincias y jugarán 4 partidos entre sí en un todos contra todos. En total cada elenco disputará 64 partidos en total ; se aplicará el método que usan todas las ligas menores e independiente como la que emplea la liga Canam en la que los equipos se enfrentan una sola vez pues juegan 4 juegos seguidos trayendo consigo ahorro en los gastos de transportación y hospedaje ademas que favorece en la organización de las transmisiones televisivas.
    Al finalizar la pre-temporada ( aproximadamente por Agosto) el campeonato pasaría a la fase Post-temporada y esta se dividiría en dos niveles: la superior o Serie Nacional A en donde se aglutinarían los 8 primeros puestos de la primera fase y la interior o Serie Nacional B en donde estarían los 8 restantes lugares. Importante en esta etapa no aplicar refuerzos todavía para conservar el apoyo de la fanaticada a su terruño y con ello conservar la masividad en todos los estadios del territorio. En esta segunda fase los 8 equipo de cada nivel jugarían igual 4 partidos entre sí, todos contra todos, 32 en total y con el mismo sistema de 4 enfrentamientos seguidos (al principio la selección de la sede o estadio donde se efectuará el encuentro que sea decidido como se hacen en eventos internacionales, apostando con una moneda y en la segunda etapa se escogería el terreno del equipo que más victorias acumule). Porque mantener dos series al mismo tiempo? Para mantener y desarrollar a todos los peloteros jovenes y experimentados jugando ininterrumpidamente pues sumando la pre-temporada con la post-temporada serían (64 + 32 = 96) 96 partidos , el tiempo mínimo perfecto para mejorar la calidad de cualquier liga de beisbol. Además tambien para evaluar la capacidad de reacción de los directores menos afortunados que terminen en la serie inferior habiendo estado a punto de clasificar a la serie superior.
    Y despues vendría el Plato fuerte de esta propuesta, la Series Cuba ( llamemosla así en alusión a la Serie mundial de MLB o serie Japan en convergencia a como lo llaman en el país nipón). Una vez finalizada ambas Series viene lo más interesante y el porque se debe mantener jugando fuerte todos los equipos de ambas series ya que hay oportunidad para todos de llegar a las Series Cuba. Pues de la Serie Superior A solo clasifican los primeros 4 lugares a la etapa invernal y los otros 2 cupos restantes se definiría en una play off de tres juegos a ganar dos (o cinco juegos, depende de lo que decida más conveniente la Comisión Nacional) entre los lugares 5 y 6 de la Serie Nacional A contra los lugares 1 y 2 de la Serie Nacional B, o sea los dos cupos por el comodín sería entre el vencedor del choque del quinto lugar de la Serie A contra el segundo lugar de la Serie B y entre el sexto lugar de la Serie A contra el primer lugar de la Serie B. Y así tendríamos los 6 representantes que llegarían en justa medida a luchar la etapa final o liga invernal. Aquí si emplearíamos el mismo sistema de refuerzos empleados en la actual serie empezando a pedir desde el sexto puesto hasta el primero y viseversa....etc. Con este método se consigue dar una segunda oportunidad a aquellos equipos que no pudieron ubicarse en los 8 primeros de tabla general ( para todos es sabido que en aquellas series de 90 partidos habían equipos con calidad en sus filas que empezaban mal y luego lograban clasificar a la final despues de hacer sus ajustes en la recta final ). Tambien esto ayudará a evaluar el desempeño de todos los directores estando en buenas o malas rachas).
    Para terminar en la etapa final o invernal si se jugaría a dos subseries entre equipo o sea , 6 Partidos en total por subserie, tres en un estadio de un equipo y las otros tres en el de otro. En total cada equipo finalizarían jugando 36 juegos en ub todos contra todos y por supuesto siempre en cada fase arrastrando las victorias paea ser justo. Luego vendría la etapa semifinal haciendo el corte a 4 equipos como conocemos con sus refuerzos actualizados para finalmente hacer los play off a los cuales estamos acostumbrados de 7 ganar 4.
    Resumen: Con esta idea conseguimos un único y merecido equipo titular que cumplió la meta despues de sortear los tres obstáculos o eliminatorias para así nos represente en la Serie del Caribe como el Campeón de la Liga Cubana y nos quitamos los Dolores de cabeza de tener dos torneos, dos directores ganadores, dos equipos vencedores....ademas se respetará el derecho de que cada provincia tenga el derecho de ganar un campeonato largo y exigente. Me dirán que al final conseguiriamos cada año 6 distintos equipos en la liga invernal. Pues bien eso nos destacaría del resto de las ligas foraneas pues desde el concepto de país socialista con nuestras limitaciones no podemos compararnos con las ligas de los países capitalistas pues en sus ligas participan clubs independientes que se autofinancian con sus sistemas patrocinio de empresas de mercado que nada tiene que ver la dirección centralizada de nuestra federación que sustenta a los 16 equipos participantes de nuestro pais. Para emplear ese sistema entonces tendriamos que cambiarlo todo desde la base y aplicar sistemas de granjas para entrenar prospectos y contratar a jugadores foraneos para elevar la calidad. Cosa que no podemos hacer en Cuba pues nuestros equipos provinciales no son clubes dirigidos por una gerencia independuente.Por ello mi propuesta se acerca a la realidad con lo que contamos en la actualidad en nuestra nación para así al menos mejorar en algo nuestro torneo principal y regalarle a nuestro pueblo un espectáculo un poco mejor en cuanto a organización.
    Entiendo que esto no va a evitar el éxodo legal de algunos prospectos pero ya eso le corresponde al Estado solucionar aumentando de manera inmediata las contrataciones en otras latitudes en tiempo antes de que emigren. Esperemos que el nuevo convenio con la Federacion Internacional comience a gestionarse seriamente como se ha prometido.

  • Otro+ dijo:

    Señoras y señores, nuestro béisbol ya ni motiva a los peloteros por todas las razones q sabemos ni a la población, oigo mejores comentarios y mejores desiciones a tomar en alguna esquina q las q se toman en el juego, ya no hay lideres a seguir importantes para hacer realzar el juego y lo peor es cada vez q se da un paso para tratar de mejorar lo q se hace es empeorar la situación .... por desgracia estamos viviendo la desaparición de nuestro “ deporte nacional” de los escenarios internacionales ... incluso ya he apostado con amigos q Cuba no obtendrá ningún título importante en los próximos 20 años... y x favor ojo.. eventos “importantes” .. basta d la torería de panamericanos y demás torneos tontos.... Cambiemos nuestro deporte nacional x el boxeo y repasemos la historia y el presente y saquemos conclusiones...

  • radames dijo:

    Ya peino canas, en mi época de estudiante, por la mañana iba al aula por la tarde al área o viceversa, para que haya béisbol, tiene que haber masividad, de que manera le enseñaremos a nuestros niños a coger el bate, si en nuestras escuelas los niños salen a las 4:30 pm, les dejan un millón de tareas escolares para la casa, que padre permite que su hijo vaya al área especial a entrenar, como podemos descubrir los talentos de esa manera, además de que no todos los que van a las eide reúnen las condiciones, por otra parte se juega muy poco béisbol en cuba y para remate bajo el sol abrasador de cuba cuando termina la primera fase de la actual estructura los que no son escogidos como refuerzos ahí quedan hasta la próxima serie nacional, la estructura de 90 juegos fue la mejor.

  • Norge Uliver Frometa dijo:

    De forma general es muy abarcador el trabajo, pero es criterio también generalizado que es necesario cambios en la dirección del béisbol en nuestro país, hay que dar oportunidad a nuevos valores con nueva mentaludad y que puedan aportar nuevas ideas, también se ha demostrado que existe material bruto en las figuras que se preparan desde las EIDE, ESPA cuando emigran a otros países, que solo les cambian el sistema de entrenamiento y se convierten en estrellas en la carpa mayor, por lo que la vista no solo debe estar en los deportistas sino en preparar los entrenadores, auxiliares y todos los que tienen la misión de hacer buena pelota en cuba, además, la garantía económica y las sanciones por incumplimientos de contratos, que hoy es un papel mas. Felicidades a Yoel, por su trabajo

  • gregorio santos ledesma dijo:

    Mi propuesta para la organización y rescate de la calidad del beisbol en Cuba es la siguiente:
    Debo aclarar que esta propuesta ya la había realizado en Cuba debate al finalizar l serie del Caribe específicamente el 12/02/2019
    -Organicemos la serie nacional de verano que sea de marzo a julio con equipos de todas las provincias y se organice la serie de invierno con 6 equipos por regiones con los mejore peloteros incluidos los que estén jugando en otras ligas esto de septiembre hasta 1era quincena de enero de ahí el ganador a la serie del Caribe y cuando toque la conformación del equipo Cuba al Clásico.
    – La serie sub23 que se juegue paralela a la serie nacional de verano y que sea por zonas ello ahorra recursos y los peloteros con resultados puedan ser subidos al equipo de la provincia y participar en el evento nacional.
    – La serie provincial evento que está casi extinguido se puede realizar paralelo a la serie de invierno y ello permite continuar el desarrollo y participación de jugadores que no van a los 6 equipos incluidos los del sub23. Así se juega beisbol todo el año sin tener que inventar series especiales para entrenar y jugar o hacer concentrados de preselecciones de 50 o más peloteros por largo tiempo para conformar un equipo nacional. Ello ayuda a estabilizar las cargas físicas y que los peloteros no lleguen a las competencias fundamentales cansados y/o sobreentrenados.
    – Deslindar las funciones de la CNB de la dirección del equipo Cuba. Las funciones básicas de esta comisión son trazar las directivas técnicas y metodológicas y elevar y desarrollar el beisbol desde las categorías escolares.
    La dirección del equipo Cuba no es el director que gane el campeonato, sino el más capaz creando una estabilidad, igual debe ser con el preparador general, el de picheo y los auxiliares; recorramos los mejores años de nuestro beisbol o veamos las demás ligas la estabilidad de los directivos. Un ejemplo en la mejor etapa del beisbol en Cuba Pedro Pérez permaneció por más de 30 años como el entrenador de picheo del equipo nacional empezó con Servio Borges y termino con Pacheco y estuvo en los dos primeros clásicos.

  • Uli dijo:

    Es díficil la tarea pero hay que ser valientes. Empezar con una nueva estructura sin cambiar otras cosas no hacemos nada...hay que profesionalidad el béisbol sin MIEDO!!!. BUSCAR pratrocinadores tanto nacionales como extranjeros para los equipos de las provincias...cobrar x lo menos 5 pesos para entrar a los estadios para ponerlos en buenas condiciones...hacer conciertos para el mismo fin... Que los patrocinadores se comprometan por lo menos atender a equipos de la base... De diferentes categorias. Reparar estadios...ect vender poluveres gorras souvenirs...permitir los anuncios comerciales en los estadios. Todo eso con le afán de parar el éxodo de peloteros del país mejorandoles las condiciones de vida y vean futuro en su país... Es triste ver cómo salen del país a otros países y muchos talentos se pierden en el camino xq par llegar aparte de tener calidad hace falta su poco de suerte...del punto de vista deportivo crear academias y llamar a los mejores entrandores y glorias deportivas que Stan tanto dentro como fuera del país... Renovar la dirección del béisbol desde la federación hasta las provincias... Está serie nacional a sido un desastre!!!.todo redonda en quitarle carga al presupuesto del estado que no puede solo con todo lo que haga falta... Ahí más cosas pero el espacio es poco... Repito por favor ESCUCHEN AL PUEBLO!!! COMO HA DICHO NUESTRO PRESIDENTE SIN MIEDO CAMBIAR LO QUE SE DEBA CAMBIAR!!!

  • el novato dijo:

    si en mis manos estubiera yo cogeria la mitad de la recaudacion de la entrada al estadio y se la diera ese mismo dia al equipo ganador del juego.
    sacarian chispas los equipos por la victoria cada jornada y esto a su vez aumentaria la entrada a los estadios,porque un buen juego de pelota a todo el mundo le gusta ver.

  • Abel Guerrero dijo:

    Siempre fui partidario de que la fórmula de más éxito de nuestras Series Nacionales fue sin duda alguna la de 90 juegos y 16 equipos. Que si son muchos, que si esto, que si lo otro...., la "Pelota" en Cuba es un fenómeno social diferente a lo que es en cualquier parte del mundo, no me imagino una Serie Nacional sin La Isla, Holguín o cualquiera de los que hoy quedaron fuera, sólo pensarlo me da pavor, sería un desastre final como cuando un barco irremediablemente se hunde. Sí, estoy de acuerdo con los 90 juegos y luego la Liga Cubana de Béisbol y con una REVOLUCIÓN del Beisbol cubano, la mayoría de las variantes descritas en el trabajo periodístico de Joel las considero acertadas pero, tendrían que cambiar muchas cosas en este país, y no sólo quienes dirigen el curso del béisbol en Cuba sino la forma de enfocar la realidad de lo práctico. No tengo dudas de que en este país el Deporte Nacional puede llegar a ser un renglón de punta para la economía del país, para bien de los que aman y los que no, a nuestro pasatiempo nacional.

  • Yoel Abich Chang dijo:

    Lo primero que hay q hacer es quitar esa cantidad de equipos y concentrar la calidad q es poca ademas desde el clásico 2006 se dice de especializar el picheo y no se hace . también cursos de arbitros PARA cambiar la zona de strike que allá afuera es otra es decir cuando cuba va a eventos internacionales va con las manos atadas

Se han publicado 477 comentarios



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Joel García

Joel García

Periodista cubano. Editor-jefe de la Redacción Deportiva del periódico Trabajadores desde 2007. En twitter: @joelgarcialeon

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