Disímiles resultan las opciones que los distintos gobiernos locales ponen en práctica para mejorar la situación del transporte en varias urbes del país. Ómnibus, taxis particulares y arrendados por el Estado, boteros y motonetas coexisten en las calles de la Isla y dejan una estela de opiniones divididas. En esta ocasión, Cubadebate se acerca a las más recientes experiencias relacionadas con el transporte popular en dos de las ciudades más importantes de Cuba.