Cubadebate

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Las delegaciones que surgieron de los entendimientos de Múnich tratan, dentro de los límites del entendimiento de Rusia y EEUU sobre la prioridad de enfrentar a "Daesh", de avanzar en la búsqueda del cese de las hostilidades, haciendo persistir las múltiples diferencias en torno a la solución política.

Los aliados de Washington en Arabia Saudita y Ankara acusan al gobierno de Estados Unidos de haber ocasionado el cambio de la correlación sobre el terreno a favor del ejército sirio y sus aliados, al no intervenir con sus tropas terrestres en dicha confrontación.

Aun así, dichos aliados de EE.UU siguen apostando de nuevo a hacer retroceder la situación y retomar su posición anterior, con un despertar estadunidense después del mandato de Barack Obama, según expresó The Washington Post.

En este contexto, el jefe de la comisión de negociación en la conferencia de Riad dijo que la agenda de las próximas conversaciones en Ginebra se limitará a un solo punto: el gobierno de transición.

Staffan de Mistura, quien ha exagerado deliberadamente su logro en la realización de la ayuda humanitaria, tal vez como parte de los preparativos de las negociaciones, encontró poco realista efectuar la reunión de Ginebra en la fecha programada previamente.

El canciller saudí prometió continuar la guerra hasta derrotar al presidente Assad, tal como lo ha expresado a través de la revista Der Spiegel. Además reveló la entrega de misiles antiaéreos a los grupos armados, en un gesto desafiante hacia Washington, según The New York Times.

Por su parte, el presidente turco está decidido a cambiar las reglas del combate en el norte de Siria, según sus amenazas sucesivas. Erdogán acusó a las “Fuerzas de la Democracia” de Siria por la explosión de Ankara, hecho que deja claro indudablemente un intento turco de socavar a Obama después varias acusaciones a Rusia e Irán.

En Ankara crecen los temores de una escalada que lleve la guerra hacia las calles de Turquía, mientras continúan las esperanzas de Erdogan en una protección aérea estadunidense que cubra la eventual operación terrestre militar turca en su “jardín trasero”.

Pero la OTAN no permitirá que se acorralare hacia una escalada militar contra Rusia, según expresó en nombre de la alianza el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo. Tal vez sea una manera de enviar un mensaje a Turquía: “si quieres ser atendido, pide algo posible”.

(Con información de Almayadeen)